martes, 8 de abril de 2008

Celcilia Bohl de Faber


Más conocida por el seudónimo de Fernán Caballero, que empleaba para firmar sus obras. Nació en el Cantón de Vaud en Suiza en 1796. Era hija del cónsul Nicolás Boh de Fanber, un hispanista alemán al servicio de Federico Guillermo III de Prusia; e hija Frasquita Larrea, una culta dama que hablaba diversos idiomas y era aficionada a la lectura.por desavenencias conyugales sus padres se separaron y ella se fue a vivir con su hermana y con su madre a Chiclana en Cádiz, dónde le tocó vivir la Guerra de la Independencia.Durante los primeros años de su vida vivió en Alemania y el resto en España, Puerto Rico, Alemania y España. En 1816 se casó con un capitán de infantería (Antonio Planlles) y se mudaron a Puerto Rico dónde su esposo había sido destinado, pero el matrimonio duró poco debido al fallecimiento del marido. Se trasladó entonces a Hamburgo a vivir con su abuela y algunos años más tarde volvió a España al puerto de Santa María, dónde se casó con el marqués del Arco hermoso y 13 más tarde volvió a enviudar. Se casó entonces con Antonio Arram de Ayava que se suicidó porque estaba enfermo de tisis.Se quedó la escritora viuda y pobre hasta que recibió ayuda de la reina Isabel II. Pero la revolución de 1868, que acabó con la monarquía la obligó de nuevo a buscarse la vida. finalmente falleció en 1877 en Sevilla siendo visitada por la reina.Fue una gran escritora y una mujer muy culta que dominaba el inglés, el francés, el alemán y el italiano. Sus obras más impotantes son La Hija del Sol, Clemencia, Lágrima, La gaviota, Pobres y ricos, y numerosos cuentos y poemas.




SUS FRASES CELEBRES:




Sé justo antes de ser generoso; sé humano antes de ser justo.¡La felicidad! No existe palabra con más acepciones; cada uno la entiende a su manera.Mis crítcas son sinceras y sin hiel, porque no la hay en mi corazón, y la desteto en literatura.Yo en todos los libros acostumbro a leer en prefacio, porque aveces suele ser lo mejor de la obra.


jueves, 3 de abril de 2008

Antonio María Esquivel







Nació en Sevilla en 1806 y muere en Madrid en 1857.Realizo sus estudios de pintura y dibujo en la academia de bellas artes de Sevilla.Se espacializó en retrato y en la técnica detallista.En 1831 se traslado a Madrid donde ganó un concurso de la academia de San Fernando y fue nombrado académico.Se integró en el ambiente cultural madrileño y participo en la fundación del liceo artístico y literario.En la academia de San Fernando daba clases de anatomía como profesor.Regreso a Sevilla en1839 y sufrió una enfermedad que lo dejó ciego y que le produjo una gran depresión.Afortunadamente recibió el apoyo de todos sus amigos y admiradores y en 1840 recuperó la visión.En 1843 fue nombrado pintor de cámara recibió varios premios como la cruz de Isabel La Católica y fue fundador de la sociedad protectora de bellas artes.Escribió un libro titulado Tratado de Anatomía Pictórica.
Sus obras más famosas son el estudio del pintor el retrato del general Prim,su autorretrato,una lectura de Ventura de la Vega,la bailaora Josefa Vargas, el retrato de Rafaela Flores Calderón,La mujer de Putifar.

martes, 1 de abril de 2008




Gustavo Adolfo Domínguez Bastida, más conocido como Becquer (adoptó dicho sobrenombre siguiendo los pasos de su hermano, el pintor Valeriano Bécquer), (Sevilla, 17 de febrero de 1836 - Madrid, 22 de diciembre de 1870), fue un poeta y narrador español, perteneciente al movimiento del Romanticismo.

Biografía

Nació en Sevilla, hijo del pintor José Domínguez Insausti, que firmaba sus cuadros con el apellido de sus antepasados como José Domínguez Bécquer, por parte de su abuela. Su madre fue Joaquina Bastida de Vargas. Por el lado paterno descendía de una noble familia de comerciantes de origen flamenco, los Becker o Bécquer, establecida en la capital andaluza en el siglo XVI; de su prestigio da testimonio el hecho de que poseyeran capilla y sepultura en la catedral misma desde 1622.

Su casa natal ya no existe. Fue bautizado en la parroquia de San Lorenzo Mártir. Sus antepasados directos, empezando por su mismo padre, José Domínguez Bécquer, fueron pintores de costumbres andaluzas, y tanto Gustavo Adolfo como su hermano Valeriano estuvieron muy dotados para el dibujo. Valeriano, de hecho, se inclinó por la pintura. Sin embargo el padre murió el 26 de enero de 1841, cuando contaba el poeta cinco años y esa vocación pictórica perdió el principal de sus apoyos. En 1846, con diez años, Gustavo Adolfo ingresa en el Colegio de Náutica de San Telmo, en Sevilla, donde le da clases un discípulo del gran poeta Alberto Lista, Francisco Rodríguez Zapata, y conoce a su gran amigo y compañero de desvelos literarios Narciso Campillo. Pero los hermanos Bécquer quedaron huérfanos también de madre al año siguiente, el 27 de febrero de 1847, y fueron adoptados entonces por su tía María Bastida y Juan de Vargas, que se hizo cargo de sus sobrinos, pero Valeriano y Gustavo se adoptaron desde entonces cada uno al otro y emprendieron de hecho muchos trabajos y viajes juntos.

Se suprimió el Colegio de Náutica y Gustavo Adolfo quedó desorientado. Pasó a vivir entonces con su madrina Manuela Monahay, acomodada y de cierta sensibilidad literaria. En su biblioteca el poeta empezó a aficionarse a la lectura. Inició entonces estudios de pintura en los talleres de los pintores Antonio Cabral Bejarano y Joaquín Domínguez Bécquer, tío de Gustavo, que pronosticó "Tú no serás nunca un buen pintor, sino mal literato", aunque le estimuló a que estudiara y le pagó los estudios de latín. Tras ciertos escarceos literarios (escribe en El trono y la Nobleza de Madrid y en las revistas sevillanas La Aurora y de El Porvenir) marchó a Madrid con el deseo de triunfar en la literatura en 1854. Sufrió una gran decepción y sobrevivió en la bohemia de esos años. Para ganar algún dinero el poeta escribe, en colaboración con sus amigos (Julio Nombela y Luis García Luna), comedias y zarzuelas como La novia y el pantalón (1856), bajo el pseudonimo de Gustavo García en que satiriza el ambiente burgués y antiartístico que le rodea, o La venta encantada, basada en Don Quijote. En ese año fue con su hermano a Toledo, un lugar de amor y de peregrinación para él, a fin de inspirarse para su futuro libro Historia de los templos de España. Le interesan por entonces el Byron de las Hebrew Melodies o el Heine del Intermezzo a través de la traducción que Eulogio Florentino Sanz realiza en 1857 en la revista El Museo Universal. Fue precisamente en ese año, 1857, cuando apareció la cruel tuberculosis que le habría de enviar a la tumba. Tuvo un modesto empleo dentro de la Dirección de Bienes Nacionales y perdió el puesto, según cierta leyenda, por sorprenderlo su jefe dibujando. Su pesimismo va creciendo día a día y sólo los cuidados de su patrona en Madrid, de algunos amigos y de Valeriano le ayudaron a superar la crisis. Ese año empieza un ambicioso proyecto inspirado por El genio del Cristianismo de Chateaubriand: estudiar el arte cristiano español uniendo el pensamiento religioso, la arquitectura y la historia: "La tradición religiosa es el eje de diamante sobre el que gira nuestro pasado. Estudiar el templo, manifestación visible de la primera, para hacer en un sólo libro la síntesis del segundo: he aquí nuestro propósito". Pero sólo saldrá el primer tomo de su Historia de los templos de España, con ilustraciones de Valeriano.

Hacia 1858 conoció a Josefina Espín, una bella señorita de ojos azules, y empezó a cortejarla; pronto, sin embargo,se fijó en la que sería su musa irremediable, la hermana de Josefina y hermosa cantante de ópera Julia Espín, en la tertulia que se desarrollaba en casa de su padre, el músico Joaquín Espín, maestro director de la Universidad Central, profesor de solfeo en el Conservatorio y organista de la capilla real, protegido de Narváez. Gustavo se enamoró (decía que el amor era su única felicidad) y empezó a escribir las primeras Rimas, como Tu pupila es azul, pero la relación no llegó a consolidarse porque ella tenía más altas miras y le disgustaba la vida bohemia del escritor, que aún no era famoso; Julia dio nombre a una de las hijas de Valeriano. Durante esta época empezó a escuchar a su admirado Chopin.

En 1860 publica Cartas literarias a una mujer en donde explica la esencia de sus Rimas que aluden a lo inefable. En la casa del médico que le trata de una enfermedad venérea, Francisco Esteban, conocerá a la que será su esposa, Casta Esteban Navarro. Contrajeron matrimonio en el 19 de mayo de 1861. De 1858 a 1863, la Unión Liberal de O'Donnell gobernaba España y en 1860, González Bravo, con el apoyo del financiero Salamanca, funda El Contemporáneo, dirigido por José Luis Albareda, en el que participan redactores de la talla de Juan Valera. El gran amigo de Bécquer, Rodríguez Correa, ya redactor del nuevo diario, consiguió un puesto de redactor para el poeta sevillano. En este periódico, y hasta que desaparezca en 1865, hará crónica de salones, política y literatura; gracias a esta remuneración viven los recién casados. En 1862 nació su primer hijo, Gregorio Gustavo Adolfo, en Noviercas, (Soria), donde posee bienes la familia de Casta y donde Bécquer tuvo una casita para su descanso y recreo. Empieza a escribir más para alimentar a su pequeña familia y, fruto de este intenso trabajo, nacieron varias de sus Leyendas.

Pero en 1863 padeció una grave recaída en su enfermedad, de la que se repuso, sin embargo, para marchar a Sevilla con su familia. De esa época es el retrato hecho por su hermano que se conserva en el Museo de Bellas Artes de Sevilla. Trabaja con su hermano Valeriano y Casta Esteban discute con él, porque no soporta su carácter y el hecho de que casi siempre ande por casa de su hermano. González Bravo, amigo y mecenas de Gustavo, le nombra censor de novelas en 1864 y el escritor vuelve a Madrid, donde desempeña este trabajo hasta 1865 con veinticuatro mil reales de sueldo. En este último año nace su segundo hijo, Jorge.

En 1866 ocupa de nuevo el cargo de censor hasta 1868; es este un año tétrico para Bécquer: Casta le es infiel, su libro de poemas desaparece en los disturbios revolucionarios y para huir de ellos marcha a Toledo, donde permanece un breve tiempo. En diciembre nace en Noviercas el tercer hijo de Bécquer, Emilio Eusebio, dando pábulo a su tragedia conyugal, pues se dice que este último hijo es del amante de Casta. Es más, Valeriano discute con Casta continuamente. Los esposos aún se escriben, sin embargo. Pasa entonces otra temporada en Toledo, de donde sale para Madrid en 1870 a fin de dirigir La Ilustración de Madrid, que acaba de fundar Eduardo Gasset con la intención de que lo dirigiera Gustavo Adolfo y trabajara en él Valeriano de dibujante; pero el 22 de diciembre muere Gustavo cuando en Sevilla hay un eclipse total de sol; un poco antes, en septiembre, había muerto su hermano Valeriano. Mientras agonizaba, pidió a su amigo el poeta Ferrán que quemase sus cartas («serían mi deshonra») y que publicasen su obra («Si es posible, publicad mis versos. Tengo el presentimiento de que muerto seré más y mejor conocido que vivo»); pidió también que cuidaran de sus hijos. Sus últimas palabras fueron "Todo mortal". Sus amigos Ferrán y Correa se pusieron de inmediato a preparar la edición de sus Obras completas para ayudar a la familia; salieron en 1871 en dos volúmenes; en sucesivas ediciones fueron añadidos otros escritos. Los restos de los dos hermanos fueron trasladados en 1913 a Sevilla, donde actualmente reposan.